jueves, 27 de noviembre de 2014


       Vaga mi alma alada, siempre
          presurosa por alcanzar alegría,
      paz, luz, belleza, poesía. Y, 
       envuelta en esa sutil nebulosa
       expandirla al andar, majestuosa.


Un taller da para muchas actividades.  Entre hilvanes, flecos y virutas, hay espacio para escribir poemas, leer libros, contemplar en algunos momentos el universo queriendo desvelar su misterio y belleza...